Viviendo el GP de San Marino desde adentro

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Artículo escrito por J. Francisco Oreamuno

Desde muy joven cultive mi amor por las dos ruedas, esto a pesar de las amenazas de mi Madre cada vez que yo trataba de convencer a mi progenitor de regalarme una moto………… “Primero muerta antes de que una moto llegue a esta casa”,…………… “Por una puerta entra la moto y por otra me voy yo”,……………….. al final en 1965 llego la primera moto y todavía mi Mama vive en la misma casa en que crecí junto a mis dos hermanas.

Mi agitada vida de joven motociclista incluyo una Honda 50cc, una Yamaha 80cc, una Yamaha 125cc convertida a 175cc, una Honda dax; luego un poquito más maduro y no por eso más responsable, una Triumph 500cc, una Honda CB 750, una BSA DB 32, una Triumph Trophy 650, una BMW K 75 S, y una Triumph Trident que todavía conservo y es objeto de una larguísima restauración. Mis planes futuros incluyen no solo la Trident sino una Triumph Flat Tracker y porque no, una Triumph Bobber, que espero contruir yo mismo a partir de un par de motores Triumph que tengo por allí; a ver que me depara el futuro.

Mi amor por las “dos ruedas” obviamente me llevo a los circuitos, no como piloto, porque me daba miedo caerme, sino como aficionado. Empecé como aficionado alrededor del Estadio Nacional, cuando los héroes se llamaban Canet, Chan, y Pitoto, ahora con más mundo y más experiencia, he llegado a ser un súper fanático de Valentino Rossi. Para mi Valentino Rossi es mucho, pero mucho mejor piloto de lo que fueron Agostini, Surtess, Mamola, Dohan, Viaggi o Criville.

Cuando las circunstancias lo han permitido, he asistido a los Grandes Premios de motociclismo, siempre con ese gusanito de tratar de verlos por dentro, tratar de mirar un poco más lejos de lo que la TV nos muestra. Con esa actitud estaba en el Circuito de Misano justo al frente del Garage de Ducati,  y gracias a un grupo de prensa francés, pude penetrar los secretos del Equipo Ducati Corsa.

Valentino Rossi, es diferente a los demás pilotos porque “es capaz de utilizar la moto como una herramienta y sacar de ella lo mejor”, esta frase no es de Francisco Oreamuno, es de Jeremy Burgess el legendario jefe de mecánicos de Valentino, y es justamente a Jeremy a quien me di la tarea de seguir paso a paso durante la sesión de clasificación en Misano. Obviamente sin estorbar, ni hacer que mi presencia se notara, en el seno de un grupo de ingenieros de altísimo nivel que estaban allí para trabajar. Yo estaba allí para mirar, disfrutar, aprender y poder contarles a ustedes esta experiencia.

El Sábado a las 14.10 (2.10pm) Jeremy atraviesa la calle de los boxes para ir a instalarse en bajo la tienda de Ducati, al lado de la pista. El técnico australiano pasa la mayor parte de la sesión de clasificación en la tienda de Ducati. “Yo podría tener toda la información en el box pero para concentrarme necesito estar al borde de la pista”…………………comenta con su acento australiano profundo en su lengua materna, el ingles.

Cinco veces durante la hora de la sesión de clasificación, Jeremy atraviesa la calle de stands, dirección el box, para reunirse con su piloto. 4 minutos de reunión en “tete a tete” al mismo tiempo que los mecánicos hacen los ajustes necesarios en la Ducati, inmediatamente, pasados los 4 minutos, Jeremy emprende el camino inverso hacia la tienda Ducati, al mismo tiempo, Valentino regresa a la pista.

En Moto GP una sesión de clasificación es una sesión cronometrada en todo, tanto en la pista como en los boxes, donde se persiguen dos objetivos; continuar preparando la moto para la carrera y tratar de hacer el mejor tiempo para la parrilla de salida. Objetivos que a la luz del rendimiento de la Ducati 46, representan una labor titánica. Durante los primeros veinte minutos, explica Burgess, salimos en “configuración corsa”,(configuración de carrera) Valentino, realiza dos heats de entre seis y diez vueltas con la moto numero uno.

Luego repite la operación a bordo de la moto número dos. De existir, como sucede a menudo, alguna duda sobre la escogencia de la dureza del caucho de las llantas, “duro o suave”, estas dos salidas sirven para hacer la escogencia final. Normalmente la moto numero uno recibe la escogencia final, de llantas para las vueltas de calificación, al final de la sesión.

Después de los dos primeros heats, Valentino entra al stand Ducati, para refrescarse e hidratarse. Al llegar todo el equipo lo rodea de manera inmediata, para recibir todas las indicaciones del piloto. Jeremy es el primero en recibir los comentarios y lo hace en ingles. Al lado de Jeremy están los ingenieros Flamigni y Conti, que continúan la conversación en italiano para obtener una mayor precisión. El ingeniero Flamigni es un escapado de Yamaha, por el contrario el ingeniero Conti fue formado en casa de Ducati y es él, el encargado de toda la gestión electrónica del motor, con especial énfasis en los parámetros de la inyección.

También los ingenieros de Bridgestone y Ohlins, Steve Jenker y Mike Norton, participan en la sesión técnica, sin embargo su participación se limita a una sola sesión. Para las llantas las variables son presión y temperatura y para la suspensión, las acciones se limitan a la pre-carga de los amortiguadores y a la carga hidráulica. A menos que Valentino, pida un cambio en los ajustes chasis, o en la dureza de amortiguación, para el equipo de Jeremy Burgess, los ajustes no toman más de unos minutos, y todo esto se hace sobre la moto que está dentro del garaje (no en la moto que está afuera al borde de la calle de boxes, la moto número dos).

Cinco mecánicos trabajan bajo las ordenes de Jeremy en la moto numero 46, Alex Briggs, Bernard Ansiau, Brenth Stephens, Gary Coleman y Mark Elder. Los cuatro primeros han trabajado con Valentino varios años y llegaron con el de Yamaha, el quinto Elder es un mecánico formado por Ducati. Entre estos cinco mecánicos, explica Jeremy, no hay funciones específicas, como en la Formula 1, todos trabajan según sus capacidades en la moto, con una excepción; las funciones de gerencia del combustible, llantas y el confort del piloto, esto lo hace Coleman.

Es en la última media hora de la sesión de calificación, que Valentino sale a “buscar el cronometro, como dicen los mecánicos. El piloto italiano lo hace en dos o tres heats de dos a cuatro vueltas cada uno, usando un neumático trasero nuevo en cada salida. Para el hombre de los ocho campeonatos del mundo y las cuarenta y nueve pole posiciones en la categoría reina del motociclismo, va a ser una ardua labor en Misano.

Cada día en Ducati es una nueva lección para nosotros me explica Burgess, el año pasado cuando la moto ganaba, nadie se hizo preguntas sobre las caídas de los pilotos, pensamos que era mala suerte y no analizamos los problemas de chasis, nuestro margen de seguridad era muy estrecho, y la moto no progresaba. Yo quiero, explica Burgess, que la moto sea fácil de manejar a muy alta velocidad, que cada piloto pueda buscar los mejores tiempos contando con un margen de seguridad en la moto. No es en realidad la posición de Valentino o Nikky en la parrilla de salida lo que me preocupa, no este año. Trabajo para poder construir una moto competitiva. Para Valentino, este año ya es historia, está dedicado a trabajar con sus ingenieros en la moto del 2012.   

Para el 2012, los motores de Moto GP serán derivados de los motores de serie, y Ducati tendrá un nuevo chasis, que más puede pedir Jeremy Burgess.

La sesión de clasificación para todas las motos Ducati fue un infierno, Valentino clasifico en el puesto 11 y Nikky Hayden en el puesto 14. Las otras Ducatis de los equipos privados, no lograron nada mejor que las motos de la fabrica; Hector barbera en la poscion 8, Karel Abraham en el puesto 12, Randy de Puniet en el puesto 15, y Loris Capirosi en el puesto 16. Definitivamente un lugar en el podio al final de la carrera estaba fuera del alcance de las Ducatis.

El domingo, todos Ustedes vieron la carrera, Valentino tuvo una salida muy rápida que lo llevo a disputar el cuarto lugar con Ben Spies y Andrea Dovizioso, una verdadera demostración de pilotaje contra dos motos mucho más competitivas que su Ducati. Me gusto muchísimo el coraje de Jorge Lorenzo, desde el inicio de la competencia salió a ganarla, a pesar de Stoner y Pedrosa; me gusto también muchísimo Marco Simoncelli, quien con un poquito más de moto (corre una Honda del Equipo de Gresini) le va a dar dolores de cabeza a Stoner, Lorenzo y Pedrosa, y finalmente me gusto muchísimo la octava posición de Álvaro Bautista con una Suzuki. Pero lo que más me gusto, y eso no lo muestra la televisión, fue poder escuchar y vivir cada segundo de la preparación, la clasificación, el warm up y la carrera desde adentro, y solo por eso valió la pena, ir hasta Misano.

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